ASOVAPE respalda medidas antitabaco pero rechaza equiparación del vapeo

Ante el último anuncio del Gobierno la Asociación de Vapeadores del Uruguay (Asovape) emitió un comunicado en el que respaldó la decisión del gobierno de derogar los decretos 87/021 y 282/022, en el marco del fortalecimiento de las políticas antitabaco. Sin embargo, expresaron su preocupación por lo que consideran una «equivocada equiparación regulatoria» entre el vapeo y los productos de tabaco calentado.

El presidente de la República, profesor Yamandú Orsi y la ministra de Salud Pública, Cristina Lustemberg anunciaron acciones que fortalecen la línea de trabajo que ubicó a Uruguay como país de vanguardia en el mundo respecto a la política de control de consumo de tabaco. En la conferencia explicaron que los decretos derogados, n.° 87/021, del 3 de marzo de 2021, y n.° 282/2022, del 2 de setiembre de 2022, sobre el uso de productos electrónicos de tabaco calentado y el empaquetado y etiquetado neutro de productos de tabaco, «eran regresivos y buscaban flexibilizar las medidas de control».

Asovape señala, en el documento, que a diferencia del tabaco el vapeo no utiliza papel ni produce combustión ni humo. A su vez aseguran que reduce hasta en un 95% los daños vinculados a enfermedades como el cáncer o patologías cardiovasculares y respiratorias. En ese sentido, insistieron en que el vapeo es una herramienta ya adoptada por miles de personas en el país para dejar de fumar, siendo que la “principal causa evitable de enfermedad en Uruguay es el tabaquismo, que provoca 18 muertes por día”.

En conclusión plantean que hay que hay que avanzar hacia una regulación del vapeo, y no hacia su prohibición. Entonces, le proponen al gobierno implementar un sistema de venta controlada, similar al del tabaco, el alcohol o la marihuana, con restricciones para menores de edad, impuestos específicos y estándares de calidad. En ese sentido, expresan la necesidad de controlar los vapeadores desechables, con especial atención a los diseños y sabores atractivos para adolescentes. Desde ASOVAPE recomendaron limitar los colores, la publicidad y prohibir de forma estricta su venta a menores.

Finalmente, solicitaron al Ministerio de Salud Pública y al Poder Ejecutivo que se reconozca el vapeo como una categoría distinta al tabaco, y que se diseñe un marco regulatorio específico que contemple también a los fumadores adultos que buscan alternativas.