Roderich’s Crypto House: un puente hacia el universo cripto
Con un enfoque educativo y humano, el proyecto impulsado por Rodrigo Castañeda ofrece una alternativa segura para ingresar al mundo de las criptomonedas, mientras Uruguay avanza hacia una regulación aún pendiente.
En los últimos años, el mundo de las criptomonedas ha dejado de ser un tema exclusivo de los expertos y ha logrado instalarse con fuerza en las conversaciones cotidianas. Estas monedas digitales que permiten transacciones de persona a persona sin necesidad de bancos ni intermediarios han revolucionado la forma en que entendemos el dinero y las inversiones. Su crecimiento logró abrir nuevas puertas para quienes buscan alternativas financieras en la era digital. Pero antes de adentrarnos en este nuevo ecosistema, conviene hacerse una pregunta esencial: ¿qué son las criptomonedas? Y sobre todo, ¿cuál es la realidad que vive nuestro país?
En entrevista con El Explorador, Rodrigo Castañeda, más conocido como “Roderich” en el ecosistema cripto de la región, nos cuenta cómo fue gestar uno de los primeros proyectos uruguayos centrados en el intercambio seguro de criptoactivos.
Egresado de la Facultad de Psicología de la Universidad de la República, Castañeda encarna el perfil de un emprendedor que supo identificar el potencial de las criptomonedas cuando aún eran un fenómeno lejano y desconocido para la mayoría de los uruguayos.
“Soy psicólogo clínico, pero mi foco principal actualmente está en todo lo que tiene que ver con el Exchange, la casa de cambio cripto. Entendí que había un potencial transformador muy grande en todas estas tecnologías y que iba a cambiar la sociedad y la cultura de las cosas como las entendemos”, comparte.
Un espacio para el intercambio
Atraído por la filosofía descentralizada de Bitcoin y el impacto social que podía generar, Castañeda decidió formarse académicamente en el área, realizando un posgrado en Cripto, Blockchain y Finanzas Descentralizadas en la Universidad del CEMA (Ucema) en Buenos Aires. A partir de esa experiencia, combinó sus conocimientos técnicos con la escucha clínica para construir una propuesta de intercambio de criptomonedas accesible, transparente y educativa.
La idea de Castañeda fue crear principalmente un espacio donde la gente pueda intercambiar dinero fiat (pesos o dólares) por criptomonedas y viceversa. Su función, generar un “puente seguro para poder entrar al mercado y a la vez ser el puente para poder salir de este y volver el dinero al banco”.
Roderich’s Crypto House se convirtió en la respuesta a una necesidad: entrar al mundo cripto de forma segura. Hoy no solo facilita el intercambio entre dinero fiat y criptoactivos, también se han encargado de crear una comunidad con información clara, concisa y al alcance de todos. A su vez combinan transparencia y protección en cada paso, haciendo un gran hincapié en la confianza de sus usuarios.
Activos con un valor
Para Castañeda, cada criptomoneda tiene sus propias características y fue diseñada con un propósito específico, por lo mismo, no todas funcionan igual. En términos generales, se puede decir que “son activos que tienen un valor, aunque el concepto es un poco más complejo”, explica.
A su vez, detalla que lo importante es que muchas criptomonedas tienen un precio en relación con el dólar y se pueden intercambiar, además de estar basadas en tecnologías innovadoras. Como todo en el mundo financiero, tienen sus riesgos, pero también ofrecen muchas posibilidades nuevas y están ganando terreno a nivel global.
El uso de las criptomonedas es muy variado, una de las formas más comunes es como inversión, ya que la gente puede comprar criptomonedas como Bitcoin o Ethereum esperando que aumenten su valor. Pero también se utilizan mucho para transferir dinero, algo que a veces no se menciona lo suficiente. Por ejemplo, alguien puede comprar Bitcoin o USDT (una criptomoneda que mantiene su valor igual al del dólar) y usarla para enviar dinero a otra persona en otro país, para pagar un servicio o simplemente para ayudar a un familiar.
Un ecosistema educativo y humano
A diferencia de otras plataformas que operan a gran escala y de forma automatizada, Roderich’s Crypto House apuesta por un enfoque personalizado. “Algunos llegan con mucha experiencia, no todo el mundo acude con la necesidad de un espacio de educación. Pero sí es verdad que hay un buen número de personas que vienen un poco perdidos de más y necesitan tener una comunidad o un lugar. Un espacio para poder intercambiar”, señala.
La educación es uno de los pilares del proyecto, por lo cual se organizan charlas abiertas, como las Roderich Crypto Talks, que combinan formación técnica con experiencias personales. Castañeda adelantó que en la agenda se encuentra el próximo evento que se llevará a cabo el 23 de agosto. En esta ocasión, estará enfocado en el papel de las mujeres en el ecosistema cripto. “Crypto Talk for Her busca inspirar, visibilizar y sumar voces femeninas a un sector en el que todavía predominan los varones”, detalla. Entre las expositoras estarán Lucía Cardellino (cofundadora de Ethereum), Carolina Gama (Bitgate y Binance) y Pamela González, especialista técnica en blockchain.
El desafío de emprender sin regulación
Aunque Uruguay fue uno de los primeros países de América Latina en reconocer legalmente los activos virtuales al haber aprobado la Ley N° 20.345, en septiembre de 2024, aún se lamenta que no cuenta con una normativa específica que regule el intercambio de criptomonedas. Castañeda explica que “la ley reconoce la existencia de los activos virtuales, lo cual es importante, pero se designó al Banco Central como el agente que va a generar una normativa en relación con la actividad del intercambio. Estamos en espera”. También adelanta que posiblemente en el mes de agosto, se cuente con noticias sobre cuál será la normativa trabajada desde el Banco Central.
Cabe mencionar que en el comienzo de Roderich’s Crypto House, las relaciones con los bancos fueron complejas. “Se cerraban cuentas, se bloqueaban transferencias, había mucha desconfianza. Era un mundo desconocido tanto para los usuarios como para las instituciones. Hoy eso ha mejorado, los bancos entienden mejor cómo funciona este ecosistema y los usuarios también son más responsables”, reflexiona.
Uruguay y las criptomonedas
Consultado en relación con la percepción del público uruguayo sobre las criptomonedas, Castañeda reconoce que persiste una mezcla de interés y desinformación. “Cada vez hay más conversación pública sobre cripto, pero aún hay mucha desconfianza. Uruguay tiene un proceso más lento y reflexivo que otros países, lo que a veces frena la adopción, pero también genera usuarios más conscientes”, asegura.
Este perfil conservador podría estar vinculado a la estabilidad económica del país. “En Argentina o Brasil, la inestabilidad llevó a la gente a buscar soluciones. Acá, como no hay urgencia, se avanza más lento, pero con decisiones más informadas. Eso tiene su valor”, destaca.
Para Castañeda, el gran desafío que enfrentan los reguladores es equilibrar el cuidado del usuario con el fomento de la innovación. “Lo más importante sería lograr que se genere una normativa que dé lugar a cierta flexibilidad y a la vez también a la creatividad y a la innovación para que haya desarrollo local”. Reconoce que se espera que se puedan conservar estas “ideas básicas de cómo se debe proceder”, siendo conscientes de que se trata de un gran desafío.
A su vez consideró que “la complejidad tecnológica de los criptoactivos exige un uso responsable. El Banco Central debe generar una normativa sin descuidar los estándares internacionales de prevención de lavado de activos”.
Confía en que el proceso lento pero seguro que sigue Uruguay terminará beneficiando al país. “No tener urgencia nos permite diseñar una regulación bien pensada, y eso puede posicionarnos muy bien en la región”, asegura.
De los casos locales a los escándalos regionales
Consultado sobre los riesgos y fraudes asociados al mundo cripto, Castañeda recuerda el caso uruguayo de Ferret Token, donde muchos usuarios perdieron dinero tras la caída del valor de un token promocionado sin garantías. En contraste, menciona el reciente escándalo en Argentina con el caso Libra, vinculado al entorno del presidente Javier Milei, como ejemplo de mal uso de la tecnología con motivaciones políticas y falta de respaldo técnico.
“El problema no son las criptomonedas, sino las personas detrás de los proyectos. Por eso insistimos tanto en educar, formar y advertir sobre los riesgos. Hay que tener mucho cuidado con las promesas fáciles de rentabilidad”, remarca.
Consejos para nuevos emprendedores
Para finalizar, Castañeda deja un mensaje claro para quienes quieren iniciarse en el universo cripto: educación y comunidad. “No fuimos educados financieramente, por eso el primer paso es aprender. No solo sobre cripto, sino sobre finanzas personales. Y lo segundo es acercarse a espacios seguros, validados, donde puedas aprender de otros con experiencia”, aconseja.
Destaca que el mundo de las criptomonedas no responde a las lógicas tradicionales del trabajo por hora o del ingreso estable. “Es un entorno de alto riesgo, pero también de grandes oportunidades. Hay que mantener la curiosidad y la paciencia que nos caracteriza como uruguayos”, concluye.
Con iniciativas como Roderich’s Crypto House, Uruguay empieza a construir su propio camino en un mundo digital que no deja de transformarse. Un camino que, según Rodrigo Castañeda, no solo necesita tecnología, sino también humanidad, educación y responsabilidad colectiva.




