
Convención blanca eligió a las nuevas autoridades partidarias

Con 202 votos, algunos abucheos y retiro de sala de algunos convencionales, el senador Álvaro Delgado resulto electo el sábado 28 de junio como nuevo presidente del Directorio del Partido Nacional.
Con un alto quórum de 464 convencionales (de un total de 500 electos en las internas de junio de 2024) y pese a que en lo previo el clima interno estaba más que caldeado, “la sangre no llegó al río”, comentó a El Explorador un alto dirigente nacionalista. No obstante, el malestar, sobre todo a través de las redes sociales, tenía que ver, entre otras razones, con la decisión del Directorio de no habilitar el voto secreto y las intervenciones de los convencionales.
La votación que tuvo lugar en la sede de Cambadu, en el Prado de Montevideo, resultó bastante pareja. Nadie obtuvo la mayoría. Delgado se impuso a su competidor inmediato por apenas 18 votos. Una vez conocido el resultado, las redes sociales volvieron a la carga y el chat habilitado por el Partido Nacional ardió con fuertes crítidas al ganador.
El principal oponente, el senador Javier García, sacó 184 votos mientras que el senador Luis Alberto Heber cosechó 45 votos. La sorpresa la dio el intendente electo de Florida, Carlos Enciso, quien presentó su propia lista y logró una de las 15 sillas del nuevo Directorio con 33 votos, aumentando su propio caudal de convencionales.
El nuevo directorio tendrá cinco representantes de Aire Fresco (Delgado, Ana Bentaberri, Alejandro Draper, Álvaro Viviano y Armando Castaingdebat), De Centro dos (Carlos Moreira y Gloria Rodríguez) y Alianza País seis (García, Enrique Antía, María de Lima, Jorge Larrañaga Vidal, Santiago Gutiérrez y Lucía Minutti). Heber también obtuvo su lugar. Además, hay dos cargos que serán ocupados por representantes de la Comisión Nacional de Jóvenes (Pilar Simón y Lucas González).

Lacalle Pou reclamó autocrítica “con amor y afecto”
Durante la Convención hizo uso de la palabra la presidenta en funciones saliente Macarena Rubio. También lo hizo el expresidente Luis Lacalle Pou cuya presencia fue otra de las novedades (se había manejado que en su lugar enviaría un mensaje grabado). El exmandatario reivindicó a la coalición republicana y agradeció a los partidos que la integraron. También defendió los logros del gobierno.
No obstante, afirmó que el Partido Nacional debía hacer un análisis “con amor y afecto” de la derrota en la última elección. Indicó que esa autorcrítica debía ser “integral” para incluir en la balanza “lo que pasó de bueno y lo que no”.
“Hace cuatro meses que dejé de la presidencia y ya ahora me digo, tendría que haber hecho esto, quizás esta decisión la debería haber tomado en otro momento, pero por supuesto el balance es positivo”, afirmó.
Por otra parte, indicó que al gobernar “nunca pusimos excusas, sí sabemos lo que nos tocó afrontar, sí sabemos que terminamos con 110 mil empleos más, terminamos el gobierno y a la gente le valía más la plata porque bajó la inflación, bajó la informalidad, la mano del gobierno no miró en cuanto y tanto hubieran votos”, agregó.
Con respecto a la pandemia, dijo que “nos tocó estar en el lugar indicado en los peores momentos de la historia de la humanidad” el 13 de marzo de 2020 y agregó que “si no hubiera gobernado el Partido Nacional y la coalición de gobierno, nos hubieran encerrado (porque) eso era lo que pedían”. También aludió a la decisión del directorio previa a la convención de no permitir que los convencionales pudieran expresarse. Sobre este punto, el expresidente preguntó “¿desde cuándo (el Partido Nacional) es un partido mordaza? Si yo me crié siendo rebelde”.
No obstante, aclaró que eso se hace “responsablemente y para mejorar no para destruir”. Lacalle Pou también se refirió a las elecciones de 2029 pero aclaró que habiendo renunciado a todos los cargos (fue electo senador pero declinó asumir la banca) “nunca me sentí tan blanco como estando en el llano”. De igual modo, buena parte de los convencionales gritó varias veces: “¡Presidente!”.
“El mensaje fue claro”
Tras conocerse el resultado, Delgado indicó que el “mensaje fue claro” porque “nadie tiene mayoría, nos dio un mensaje la soberanía partidaria de que tenemos que trabajar en unidad y con todos los miembros del Directorio”.
“Este trabajo en equipo colectivo que va a empezar en una semana, va a recorrer el país, va a escuchar y va a empezar el proceso de análisis donde voy a estar en primera fila asumiendo todo lo que haya que asumir”, agregó.
“El alma de los blancos está dolida”
Previo a la votación, Javier García reconoció que el “alma” de los blancos está “dolida” como consecuencia de la derrota electoral y sostuvo que la primera tarea es “hacerse cargo con responsabilidad” por lo ocurrido. “No me sentiría con el alma tranquila si no dijera que no soy responsable”, afirmó.
Dijo que por delante “tenemos la obligación de subsanar ese dolor, de animar el alma de los blancos” pero advirtió que la primera tarea, “el capítulo cero”, es “defender el gran gobierno que presidió y lideró Luis Lacalle Pou y que hizo que hoy el Uruguay sea mucho mejor que cinco años atrás”.
Prometió “una oposición clara y firme al gobierno del Frente Amplio, tan firme como tan leal con la democracia y con el Uruguay” y reclamó un Directorio y un partido que se “haga a la participación, un directorio cuyos dirigentes tengan más humildad, menos soberbia y más escucha de las compañeras y compañeros” y “un directorio que tenga rumbo claro y firme”.
Coincidió en que el Partido Nacional tiene que “hacer autocrítica” incluso planteó que para la próxima convención, se tiene que habilitar el “micrófono abierto y a charlar” pero manifestó que “no podemos vivir masticando la derrota”.
“La tarea empieza hoy, no es aquello de, tranquilos, viene Luis, no!, hay que construir la victoria de 2029 y se empieza a construir hoy aquí en Cambadu!”, afirmó. “Con humildad y con absoluto respeto” afirmó que está dispuesto a “hacerse cargo” y “ocupar la silla invisible de Oribe”, expresó García.
“No levantemos muros que no existen”
Luis Alberto Heber, por su lado, dijo que en el Partido Nacional “no hay alambrados, sí preferencias” y que éstas “no ofenden y son naturales”. Pero además, “no es un traidor el que fue electo por un sector pero que entiende que es mejor presidirlo por otro lado”.
“No levantemos muros que no existen, porque el partido tiene desafíos por delante, tiene que apoyar a sus gobiernos departamentales, a sus alcaldes, tiene que hacer una buena oposición”, señaló. Criticó al gobierno del Frente Amplio porque hasta ahora “no hay hecho nada” y actúan “por inercia”.
Empero, dijo que el Partido Nacional tiene que hacer la autocrítica porque “nos falta relato, ellos no hacen nada, pero tienen relato”.
Voto secreto
Por último, el intendente electo de Florida Carlos Enciso dijo que el Partido Nacional se encuentra en una “una cruz de caminos” porque “termina un gran gobierno y perdemos las elecciones” y después en mayo “retomamos el apoyo en la mayoría de los departamentos”.
Afirmó que este fenómeno “hay que analizarlo, para no cometer errores, algunos forzados, algunos inducidos, algunos exógenos”. Indicó que sueña con un Directorio de cara al interior profundo que recorra no solo las capitales departamentales sino que esté presente también en el “entramado económico y social del país”.
Agregó que ese Directorio active su secretaría de asuntos sociales, la formación de los jóvenes y un área internacional porque “no puede andar a veces a los bandazos yendo una delegación a China y después jutándonos con los partidos de ultraderecha de Centroamérica”. “No, señores, tiene que haber una claridad en la concepción nacional, americana y popular de nuestro partido”, indicó.
Enciso también defendió el voto secreto porque hay que ser “coherentes” con las luchas de los blancos de Timoteo y Aparicio Saravia y porque el Partido Nacional tiene que tener capacidad de “escuchar”.
Además, indicó que hay que estar atentos porque el Frente Amplio supo montar una maquinaria electoral que “aunque sean mal gobierno ganan elecciones”. Por último, manifestó su aspiración de que en 2029 el Partido Nacional vuelva a ganar el gobierno encabezado por Luis Lacalle Pou.